viernes, 9 de julio de 2010

PAROTET

La hermosa libélula circulaba por el río. Volaba entre los juncos de agua, cerca del puente de hierro sobre el río, donde éste daba la vuelta. La belleza gratuita de la naturaleza a veces etérea. El tacto suave de sus finas patas.

Está pintado directamente con el capuchón de la tinta china y unas pinceladas de aguada.